El carril bici, o como chapucear con el dinero de todos

No se cansan desde el gobierno socialista de Castilleja de lanzarse piropos a sí mismos para dar la impresión a la ciudadanía de hacer las cosas bien. Pero la realidad es muy distinta. La realidad es que se hacen las cosas sin previsión, y por lo que parece, sin idea alguna de lo que se está haciendo. El ejemplo más claro es la construcción del carril bici en nuestra localidad. Un carril bici que nace con graves problemas de operatividad.

Un carril bici es operativo cuando se construye con unos parámetros idóneos, es decir, que sea práctico y funcional. Ya me dirán ustedes qué tiene de práctico y funcional un carril bici que no tiene el ancho suficiente para que circulen dos bicicletas juntas. Un carril bici que tiene obstáculos en toda su longitud, las farolas que no se han querido trasladar y ocupan parte del carril, convirtiéndose así en un peligro para los ciclistas.

 

Pero el colmo de los despropósitos no es tener que sortear las farolas. El colmo es que durante la ejecución de las obras se encontraron con la problemática de qué hacer con los contenedores soterrados que se encuentran en la acera por donde discurre el dichoso carril bici. La solución no ha podido ser más absurda e inapropiada. La solución adoptada es que el ciclista que circule por el carril bici debe bajarse de la acera, circular por la calzada hasta sortear los contenedores, y volver a la acera.

Esto, que es una auténtica idiotez, se conviente en una perfecta imagen de la falta de recursos de un equipo de gobierno que prefiere llevar a cabo proyectos sin valor práctico alguno, antes que invertir el dinero en cosas útiles.

Pero la cosa no queda ahí. Cuando se decide hacer semejante chapuza para evitar cambiar de sitio los contenedores, se encuentran con que el ciclista corre peligro al tener que ocupar parte de la calzada y se opta por una solución salomónica para evitar accidentes. ¡¡Cambiar el sentido de la circuación de toda la calle!!, y se pone de una única dirección. Naturalmente los vecinos de la barriada Puerta Castilleja importan bien poco a nuestro alcalde y equipo de gobierno, ya que ahora los obligan a rodear toda su barriada para poder salir de Castilleja. Una buena forma de ganarse votos... ah, no, que en esa barriada no se vota mayoritariamente al PSOE.

   

En definitiva, estos señores (y señoras) que nos gobiernan son unos absolutos irresponsables que no saben como gestionar nuestro patrimonio eficazmente. Se les da una subvención y lo emplean en un esperpento de carril bici que se asemeja más a una pista americana con infinidad de obstáculos, y que pone en serio riesgo la integridad de los ciclistas.