Existe un libro que se escribió en el año 500 a.C., es decir, tiene más de 2.500 años. Ese libro es un compendio de estrategias militares que escribió un famoso general chino llamado Sun Tzu, y que se titula “El Arte de la Guerra”. Aunque les parezca mentira es uno de los libros más leídos del mundo, y que, aún hoy, sigue estando de actualidad porque se suele utilizar para muchos ámbitos profesionales, sobre todo en marketing.
A mis manos llegó hace unos años durante un curso de marketing político que me impartieron en el PP, y la verdad es que me interesó tanto que acabé por leerlo. Ustedes dirán que qué tiene que ver esto con los temas que normalmente se tratan en éste humilde blog. Muy sencillo. Es, simple y llanamente, porque después de lo acontecido en el último pleno recomendaría a nuestros capitulares que le diesen un repasito a éste libro para que aprendiesen a elaborar estrategias efectivas, y así evitar el “churro” que han elaborado guiándose más por las tripas que por la cabeza.
Han demostrado, todos sin excepción, que la única estrategia es asediar el castillo del enemigo hasta conseguir su capitulación. Pero no se han parado a pensar que una estrategia de acoso y derribo puede tener consecuencias graves, y acabar con víctimas colaterales. En éste caso, y después de asistir a un pleno tan bochornoso como el último, las víctimas de la guerra PSOE-PP-IU-CnA son, ni más, ni menos, que todos y cada uno de los ciudadanos de esta nuestra villa.
No se me puede a mí definir como pro-socialista, pero tampoco quiero echar tierra sobre un cadáver vivo. Lo de que un alcalde trabaje a tiempo parcial, y gratis, para el ayuntamiento me resulta tan irresponsable como inaudito. Que nuestro alcalde se permita llegar a un pleno sin haber acordado previamente con alguna fuerza política el apoyo a sus propuestas, es de una torpeza inimaginable. Que las fuerzas políticas de la oposición no sean capaces de negociar entre ellos una alternativa a las propuestas de alcaldía, y hagan cada uno la guerra por su cuenta, denota la poca capacidad política de quienes aspiran a gobernar algún día.
La idea de un ayuntamiento sin responsables políticos con dedicación exclusiva nos retrotrae a los años del franquismo, en los que los alcaldes sólo acudían a los ayuntamientos a firmar papeles. ¿Cómo se puede pensar que un alcalde, en pleno siglo XXI, no puede dedicarse en exclusiva a gobernar un pueblo de 17.000 habitantes como Castilleja?. Se imaginan que acudan al ayuntamiento para hablar con el alcalde para exponerle un problema y les digan “el alcalde no recibe porque está en su trabajo”. No voy a ser yo quien diga lo que debe cobrar un alcalde, porque eso es responsabilidad de los partidos políticos, pero desde luego sí me puedo quejar de que la gobernabilidad de una población como la nuestra se ponga por detrás de los intereses partidistas. La austeridad, ese término que han usado tanto los partidos en la pasada campaña electoral, ha pasado a ser una palabra vacía. El gobierno no cobra, la oposición sí. No sé si ha sido un error de estrategia del grupo socialista, pero si yo soy el alcalde y la austeridad sólo vale para el gobierno, les puedo asegurar que en éste ayuntamiento sólo se cobraría por asistencias a plenos. Las asignaciones a grupos y concejales las quitaba, y que cada palo aguantase su vela. Seguro que se llegaba a un acuerdo global en menos de 24 horas.
Como es lógico estas actuaciones nos hacen sospechar que la intención es conseguir que el alcalde acabe por dimitir, cosa políticamente legal pero moralmente reprobable. Creo que ha llegado la hora de asumir el rol que le ha tocado a cada uno. Unos en la oposición, y otros en el gobierno. A partir de ahora deben procurar llegar a entendimientos para sacar a Castilleja del agujero en que nos han sumido desde hace ya demasiado tiempo. Y aportar, no dividir. La legislatura pasada fue un ejemplo de lo que no se debe hacer para gobernar un pueblo, ahora, eliminada la mayoría absoluta del PSOE, la oposición debe dar ejemplos claros de que saben realizar la labor que las urnas le han otorgado, y el gobierno aprender a gobernar llegando a consensos, que ahora, más que nunca, son necesarios para el devenir de nuestros destinos como villa.
Les recomiendo a todos los grupos políticos que dejen las estrategias militares para los que cobran del ministerio de defensa, y se dediquen por entero a demostrarnos que realmente son parte de la solución, y no el problema. En esta guerra el enemigo no son los compañeros de bancada, lo es el paro, la crisis económica, la inseguridad, las diferencias sociales, los desahucios, la falta de conciencia social, etc. Dedíquense a eso, y no a tumbar al adversario, y alimentar las discrepancias entre compañeros. Todos a una, por Castilleja, POR FAVOR.
Aunque pretendo seguir con el blog inactivo no podía dejar de opinar sobre la actualidad política castillejana. Lo del último pleno no podía dejarlo sin comentar.